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¿Eres valiente? ¿Sueles salir de tu zona de confort? ¿Practicas deportes que te llevan a exprimir tu máximo potencial y explorar nuevos límites? ¿Te gusta viajar? ¿Emprender negocios? ¿Realizar nuevos estudios?

La zona de confort, ese estado personal y profesional que nos permite vivir en el control de lo conocido. 

Tus habilidades, tus conocimientos, tus actitudes y comportamientos forman parte de tu zona de confort.

Vivir en un lugar desde hace tiempo, el trabajo de cada día, la pareja de siempre, los amigos del barrio… Todo ello nos genera una estabilidad en la que nos movemos con facilidad, se trata de la comodidad de lo conocido.

La rutina, ya sea positiva o  negativa, es zona de confort. El atasco de cada mañana, tu compañero de trabajo, la discusión con la pareja… todo ello nos genera un estrés inconsciente que nuestro cuerpo tolera.

Más allá de nuestra zona de confort se haya la zona de aprendizaje. Son aquellas situaciones de la vida que nos hacen observar, experimentar, comparar y aprender.

Realizar un viaje, tener nuevos clientes, estudiar un idioma, conocer una cultura… todo ello nos genera un estado emocional placentero cuando lo hacemos en coherencia con nosotros mismos.

Hay personas que llevan un estilo de vida basado en el constante cambio y esa aventura constante se convierte en su confort, evitando lo permanente y estable en el tiempo.

Sin embargo hay otras que les aterra moverse de su lugar y círculo de siempre, por lo que permanecen en la rutina y el no cambio.

Mas allá de la zona de aprendizaje está la zona de pánico o zona de no experiencia. Aquella zona que no conoces y que no sabes cómo van a salir las cosas. 

Cuando te encuentras ante esta zona, aparecen personas a tu alrededor que te dicen que «no lo vas a lograr», «es un locura», «te vas a arrepentir», «te va a salir mal»….pero, ¿y si sale bien?

«Estoy agradecido por todos los que me dijeron NO. Es gracias a ellos que estoy siendo yo mismo». Albert Einstein

Al salir de la zona de confort, conoces cosas nuevas. La experiencia te hace sabio en la vida. 

Siempre puedes volver a tu antigua zona de confort aunque dudo que te conformes con ella.

Piensa que te vas sólo a una ciudad enorme, en una cultura diferente, con un idioma del que apenas hablas. Los primeros meses pueden parecer un infierno, pero pasado ese tiempo habrás ampliado tu zona de confort.

El ego y el miedo a la incertidumbre

Ego, del término latino persona,  remite a la máscara que llevaban los antiguos actores en los solemnes rituales del teatro clásico.(1) 

Carl G. Jung emplea el término para referirse a las expresiones de energía arquetípica encaminada a una adaptación a la realidad externa y a la colectividad.(1)

Nuestras personas  representan los papeles que desempeñamos en el teatro del mundo; son las máscaras que llevamos en el juego de vivir en la realidad externa. (1)

El miedo al fracaso, al qué dirán y el miedo a perder la seguridad, es a lo que se aferra el ego.

Tememos perder lo que tenemos, todo aquello con lo que nos identificamos y que en definitiva para muchos es lo que somos.

Porque el ser humano se identifica más por lo que hace y lo que tiene que por lo que realmente es. Estas personas no han autoindagado lo suficiente hasta llegar a conocer su verdadera esencia.

El ego, esa máscara con la que nos relacionamos con el mundo, corre peligro de desaparecer, de cambiar, y hará lo posible para evitar esa tragedia. Tiene miedo al fracaso, a las opiniones de los demás, a la crítica y el juicio, por ello nos mantendrá en la zona de confort.

Recuerdo cuando practicaba escalada, que la gestión de las emociones jugaba un papel importante para la consecución del objetivo. Pues el ego te ponía cualquier excusa para que no arriesgases, para que no te lanzases al siguiente agarre. 

Pensamientos del tipo «hoy no es buen día para encadenar la vía», «ayer entrenaste y estás cansada»… cualquier justificación le vale al ego para que no arriesgues su integridad.

Supón que eres un escalador que encadena fácilmente 7b a vista y un día no te meneas en un 7a, el ego te puede hacer sentir culpable porque tienes que mantener tu imagen, tu estatus, tu identidad.

El miedo es la resistencia del ego. Una vez desaparece el miedo, estás ampliando tu zona de confort.

Tensión emocional vs. tensión creativa

Ante una decisión a salir a la zona desconocida, dos fuerzas contrapuestas tirarán de ti en sentido contrario.

La tensión emocional te  mantendrá en la zona de confort, los miedos. Mientras que la tensión creativa te impulsará a salir a la aventura, a ser intuitivo y explorar lo desconocido.

«Dentro de veinte años estarás más decepcionado por las cosas que no hiciste que por las que hiciste. Así que suelta las amarras. Atrapa los vientos alisios en tus velas. Explora. Sueña. Descubre». Mark Twain

¿Cuál es el secreto?

Confianza en uno mismo. Estar alineado con tu propósito, con tu corazón.

«Cree en ti. Tú eres el dueño de tu vida. Lo que no decidas tú, lo decidirán otros por ti» 

Gestionar adecuadamente el miedo nos permite aumentar nuestra autoestima, permitiéndonos ver el desafío con más seguridad.

Levantarte cada día con un buen motivo por el que invertir tu energía, tu visión personal, tu «por qué».

En el camino todo es nuevo y te podrás sentir pequeñito, pero no olvides tu visión y que la zona de confort irá aumentando conforme vayas caminando.

«Si vives cada día como si fuera el último, algún día tendrás razón» Steve Jobs

Parece fácil, ¿verdad?

La teoría la sabemos todos, pero cuando llega la hora de la verdad…

Me considero una mujer valiente y las decisiones que tomo en mi vida me lo corroboran. Nunca he experimentado tanto miedo como con la película de Paranormal Activity (llorar de terror es muy heavy, aviso)

El caso es que, tanto en la escalada, como en la Guardia Civil, como en la conducción, como en la vida, me gusta correr riesgos. 

Sin embargo, nunca había experimentado lo que es la resistencia del ego a desaparecer. La resistencia al cambio, el miedo a la incertidumbre.

Fue durante la inmersión en los cursos en Bioneuroemoción de la que tanto os he hablado. Durante esos cursos llegué a entender tanto la manera de funcionar de la psique humana, que todas mis creencias y mi identidad se desvanecieron.

Pasaba días sin dormir y llorando sin parar conforme tomaba conciencia de que no era quien creía que era, era la inmensidad del universo entero.

Aquella experiencia amplió mi perspectiva de lo que realmente soy. No sólo era una mujer valiente, Guardia Civil, escaladora y con toda una mochila cargada, sino que era todo aquello que yo quisiera ser.

Lo era Todo y nada al mismo tiempo. Era mágico como lo único que prevalecía de mi identidad era el Amor.

Conforme pasaban los días de curso era todo amor. Desaparecieron mis miedos y creencias limitantes para rebosaba amor incondicional hacia todo el mundo.

Después del curso tomé la decisión de Dejar la Guardia Civil. Proceso que ha llevado un tiempo de subidas y bajadas pero, manteniéndome firme en mi decisión, seguí para delante.

Se avecinan cambios

El 1 de abril es oficial que dejo de ser Guardia Civil. Hasta ahora he tenido tiempo de probar cosas hasta encontrar mi propósito de vida, la ayuda a los demás, pero en este caso desde el estudio del inconsciente, ese gran desconocido.

Los miedos me han hecho plantearme trabajar como camarera si mi proyecto no me da de comer, aunque no es algo que quiera hacer, pero que haré si veo necesario.

Anoche me desperté a las 03:50 de la madrugada por un sueño. Soñé que buscaba trabajo de camarera :O ¡¡Mi inconsciente me despierta ante el peligro!! jajaja.

Me desvelé sin volver a pegar ojo, entonces mi mente empezó a maquinar. Mi ego se aferra a lo seguro pero yo no estoy de acuerdo con él. Quiero apostar con todo lo que tengo porque creo en mi, en lo que me hace realmente feliz.

Lloraba como cuando se desvaneció mi identidad durante los cursos hace casi un año. El miedo a la incertidumbre es algo que hay que aprender a gestionar, para elevar la autoestima y experimentar la grandeza que hay en nuestro interior.

Sólo hay que caminar. Es el viaje del héroe, donde la intuición y las decisiones de hoy determinarán el mañana.

«Un viaje de mil millas comienza con un solo paso». Lao Tzu

¿Y qué hago con la ansiedad?

Reconocer la ansiedad, ya es un paso importante. La mente tiende a irse al pasado o al futuro, de modo que nos imaginamos un futuro en base a lo vivido en el pasado.

En mi caso, mi experiencia de camarera durante muchos años de mi vida, la vuelvo a proyectar como posibilidad de futuro.

El miedo a la incertidumbre genera mucha inestabilidad emocional, a unas personas más que a otras. La ansiedad puede verse manifestada con la comida, el sueño, los cambios de humor…

Tomar conciencia del cambio que estamos viviendo y reconocer el miedo y la ansiedad nos permitirá tomar medidas para remediarlo.

* Intentar meditar varias veces al día. De este modo relajas el sistema nervioso y la amígdala segrega menos hormonas, ayudando a equilibrar tus emociones.

* Visualiza tu meta a corto plazo, dónde quieres llegar para ponerte a trabajar ya.

* Focaliza la energía en tu propósito de vida. Haz aquello que amas con pasión y dedicación. 

«El éxito consiste en obtener lo que se desea. La felicidad, en disfrutar lo que se obtiene». Henry Ford

* Organiza tu tiempo. Da prioridad a aquello en lo que crees y vive cada instante presente como si fuera el último.

* Despéjate. Conecta con la naturaleza y haz ejercicio

* Socializa. Comparte tus emociones y tus sueños con aquellos que te apoyan. La motivación se multiplicará.

* Agradece cada día por lo que tienes. El mañana no existe, todo es aquí y ahora. 

* No te hagas expectativas. Deja de creer que sabes qué es lo mejor para ti.

* Suelta el control. Fluye en la incertidumbre, donde se abre el campo de las infinitas oportunidades.

Todo es cuestión de ir caminando. Las subidas y las bajadas forman parte del cambio, pero tranquil@, la aventura merecerá la pena.

Me despido con una bella frase de Un Curso De Milagros que dice así:

«La presencia del miedo es señal inequívoca de que estás confiando en tu propia fortaleza». Libro de ejercicios: Lec, 48, pág. 84

Referencias Bibliográficas:

Youtube video: ¿Qué es la zona de confort?

(1) Espejo del yo. Imágenes arquetípicas que dan forma a nuestras vidas. Christine Downing ​