Tal vez un síntoma físico o enfermedad llame a tu puerta para que inicies ese viaje hacia el interior.
Tal vez sea la lucha que mantienes con tu cuerpo y la comida, impidiéndote vivir en libertad
O tal vez sea la insatisfacción o bloqueo sexual lo que te lleve a pedir ayuda
También puede ser la desmotivación profesional, una ruptura, una pérdida, una crisis de identidad o la necesidad de conocerte en profundidad …