Tu cuerpo y tu vida son un reflejo de tu neurosis mental y caos emocional.
Si no eres capaz de disfrutar de la soledad y el silencio, de tener un propósito en la vida que te llene el alma, de disfrutar de tu cuerpo y tu sexualidad con calma y armonía es que todavía tienes mucho que sanar.
Este es el viaje que todos, tarde o temprano, tenemos que emprender para alcanzar la plenitud y la dicha de ser una persona libre, coherente y alineada a lo que que el destino quiere de ti.
Y si no escuchas la llamada de tu corazón la vida te parará para que la escuches a través de la enfermedad, la insatisfacción sexual, la desmotivación profesional, una ruptura, una pérdida, un accidente… la vida siempre te invita a despertar.