Estas mujeres decidieron emprender el viaje de la heroína para desatar la Diosa que vive en cada una de nosotras
“Gracias por ayudarme a amarme. Es lo único en la vida que siento que estoy haciendo por mi y me encanta”
Sonia Gallego
Ella es Vigmar Roa. Padeciendo un trastorno de alimentación aprendió a amar su cuerpo, sus ciclos y respetarse cada día con la alimentación. Mejoró su relación consigo misma y por ende con su madre y en sus relaciones.
Ella es Mónica Cebrián. En su búsqueda por despertar su feminidad, emprendió el viaje de la heroína para comprender cómo su historia y sus creencias la separaban de su naturaleza de mujer.
Ella es Rosa Arellano. Una valiente heroína que necesitaba saber quién era y qué quería en la vida. Se encontró, se empoderó y se alineó a la mujer que había venido a ser responsabilizándose de sus heridas y de su niña interior.
«Mi experiencia con tu trabajo ha sido un auténtico regalo lleno de sabiduría. Gracias por poner luz en mis sombras con grandes dosis de amor, generosidad y entrega. Por acompañarme en tan delicado tránsito con tanta claridad, intuición y rapidez. Un lujo para mí haber tenido la oportunidad de trabajar contigo. Transmites coherencia y autenticidad. Todo mi agradecimiento con amor por esa gran labor que realizas”
Begoña Sáez
Ella es Bárbara Gutiérrez, una gran heroína que necesitaba encontrar la paz dentro de ella, comprender sus estados emocionales más dolorosos y aprender a transitarlos con aceptación para amarse en su luz y en su oscuridad.
Ella es Carolina Santos. Aumentó su nivel de coherencia y se conectó a sí misma deshaciéndose de los patrones repetitivos de sus antepasadas. Su valentía le llevó a despertar a su Diosa interior.
Ella es Isabel López. Una super heroína que se atrevió a sumergirse en su oscuridad para amarse en toda su plenitud. Murió para volver a nacer y encontrarle el sentido a la vid.
“Empoderada, empática, entregada, son algunas de las cualidades de esta talentosa y curtida guía, coach, precursora de Vivir en Coherencia, quien nos invita al autoconocimiento ayudándonos e invitándonos a nosotras, mujeres, a descubrir y conectar con la diosa que llevamos dentro. Gracias por cogerme de la mano y acompañarme en mi andadura, en el tránsito de un revelador, enriquecedor y, sobretodo, sanador ejercicio de introspección. Gracias de nuevo por ayudarme a evocar esa espartana guerrera que me habita”
Miriam López
Ella es Noche Diéguez, hermosa mujer que emprendió el viaje de la heroína para encontrarse consigo misma, con su feminidad y reconciliarse con su niña interna. Amarse, aceptarse y poner luz en su oscuridad fue el resultado de nuestro viaje juntas.
Ella es Nazanín Salavati. La presión emocional con su madre le llevó a buscar ayuda para emprender el viaje del perdón, la aceptación, compresión y liberación. Revivir sus heridas y reconocer su historia le permitió encaminarse en su propósito de vida.
Ella es Violeta Bonson, valiente mujer que decidió emprender la búsqueda de su autoestima y paz interior. Sumida en una relación de apego emocional que no le llenaba, aprendió a escucharse, amarse y respetarse para vivir en coherencia con la mujer que realmente es.
“El destino me ha llevado a ti y a tu acompañamiento en este viaje increíble, con un amor y una dedicación únicos. Te agradezco con todo mi corazón lo que has hecho por mí, ayudarme a tomar conciencia y a ver más allá. He visto muchos cambios reflejados en mi día a día, desde la reaparición de la menstruación, a mis relaciones con mi entorno y las personas que aparecen en mi vida. Gracias»
Costanza Lapiccirella
Ella es Jennifer Ridríguez, una valiente heroína que, sumida en una profunda depresión, decidió pedir ayuda para aventurarse en el viaje de conocerse, sanar a su niña interna y encontrarle el sentido a su vida para empezar a brillar.
Ella es Marta Cortina, una mujer que tras años de amenorrea recuperó su menstruación gracias a emprender el viaje de autoconocimiento que la llevó a sanar sus heridas de la infancia y desatar esa mujer que reprimía en el fondo de su corazón.
Ella es Katia de Paoli. Inmersa en una relación tóxica y una pérdida de rumbo en la vida, recuperó todo su poder tras tomar conciencia y conectar con su verdadero propósito de vida. Equilibrar sus energías marculina/femenina fue clave para amarse y empoderarse como mujer.
“Patricia llegó justo en el momento de mi vida donde ocupaba una dirección, contaba con mucha información, pero le daba muchas vueltas para armar el rompecabezas. Ella me ayudó a encontrar mi centro, entendí que yo soy responsable de mi felicidad, a no ser juiciosa, exigente y aceptar que debe haber un equilibrio. Soy afortunada por el simple hecho de tener la oportunidad de dar un giro y cambiar mi chip. Gracias a ella todos los días trabajo para mantenerme en equilibrio, no es sencillo, pero cada día es un nuevo comienzo. Gracias”
Michelle González
Ella es Sonia Gallego, recuperó su menstruación después de cuatro años de amenorrea gracias al autoconocimiento y a permitirse ser la mujer que de verdad había venido a ser. Amarse y respetarse fue la clave de su liberación.
Ella es Nidia Pérez, perdida emocional y espiritualmente, emprendió el viaje de encontrarse a ella misma, de morir para volver a nacer. Un resurgir del ave fénix que le permitió amar la vida, la comida, el sueño, su cuerpo y su propia feminidad.
Ella es Regina Vera, recuperó su menstruación después de años de amenorrea y toda una vida tomando anticonceptivos. Conectar con la mujer que reprimía dentro de ella, la empoderó para empezar a brillar con amor propio y seguridad.
“Patricia es una persona encantadora y una gran profesional. Gracias a ella he podido atar los cabos necesarios para comprender el sentido de mis emociones negativas y de mis creencias limitantes. He tomado conciencia y he decidido con firmeza vivir la vida en coherencia conmigo misma. Me siento más en paz, Gracias”
Elena García
Ella es Jennay Cervantes. Una mujer que descubrió el gran potencial que vivía en ella permitiéndose ser la mujer que de verdad quería ser, con seguridad, respeto y amor propio.
Ella es Janette Walker, tomó consciencia de que había otra forma de ver la vida, de que la respuestas a todos sus problema estaban dentro de ella.
Ella es Maribel Dávila, una mujer que decidió encontrarle sentido a sus problemas interpersonales a través de conocer su historia y trascenderla desde el amor y la coherencia emocional.
“Gracias Patri. Sabes sacar lo mejor de cada persona. Soy tan afortunada de haberte encontrado y estar aprendiendo tanto a tu lado… Voy haciendo cambios poco a poco, pero muy consciente de ellos, que creo que es muy importante. Eres luz, gracias”
Lucía Ripoll
Ella es Teresa Barva, una mujer que apostó por encontrar las respuestas a sus problemas económicos y emocionales. Conocer su historia y las creencias que le limitaban de la abundancia le permitió empoderarse para decidir cómo quería vivir cada vicisitud.
Ella es Mónica Carpintero, tras una anorexia y una amenorrea (ausencia de menstrución), comprendió lo que su cuerpo y su vida estaban diciendo de ella. Decidió cambiar el rumbo de su vida empezando por amarse y respetarse cada día de su vida.
Ella es Mariona Pérez. Emprendió este viaje para encontrar el sentido a su vida, conectar con el propósito que le hiciese feliz y comprender sus desequilibrios emocionales para vivir en paz y en coherencia emocional.
“Gracias Patricia por enseñarme esta técnica para afrontar las situaciones. Estoy sorprendida conmigo misma y eso que han pasado sólo tres días. Es inimaginable cómo podemos cambiar la percepción de las cosas con tan solo unas preguntas. La verdad es que me siento genial conmigo misma y con los demás. Estoy muy feliz con lo que tengo. Gracias, volveremos a vernos”
María Pilar Serrate
Ella es Carmen Martínez, recuperó su menstruación gracias al autoconocimiento y la comprensión de su información. Sanó a su niña para que resurgiera la mujer de su interior.
Ella es Anna Moffa, en sus primeras sesiones ya empezó a hacer cambios en su vida. Tras un duelo familiar decidió aprender a soltar, a dejar ir y amarse cada día más. Aprendió a soltar la culpa y a elegirse a ella como su primera prioridad.
Ella es Barbara, una mujer que buscaba respuestas a sus comportamientos y a sus estados emocionales internos. Hacer consciente el inconsciente le ha quitado un peso de encima para empezar a sanar sus heridas.
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